Monica Gifré Solís
Hotel de revista sin alma. Hemos estado hospedados allí cuatro noches, muy cómodos y muy bien atendidos por Silvia y su compañera. Las cenas correctas y el desayuno básico. La habitación muy cómoda y es inconcebible que en un hotel de cuatro estrellas tengan puesta una cortina de plástico arrugada y sucia en la bañera. Muy bonito pero se respira frialdad. No hay información de ningún tipo en cuanto a sitios que visitar. .
Antonio Jiménez Valcárcel
No se lo que es